Espacio Natural de la Sierra de la Demanda
Una visita donde disfrutarás de la naturaleza y cultura del lugar
La Sierra de la Demanda forma parte de la Cordillera Ibérica y se extiende entre las provincias de Burgos, La Rioja y Soria. Este territorio, surcado por cumbres, valles y ríos, encierra una notable riqueza natural y cultural. En él se encuentran algunos de los picos más representativos del norte peninsular, como el San Lorenzo o el San Millán.
Este espacio natural no solo destaca por su altitud o relieve, sino también por ser hogar de comunidades que han sabido mantener su identidad, vinculadas a comarcas como Tierra Pinariega y localidades históricas como Salas de los Infantes, Ezcaray o Pradoluengo. Su diversidad paisajística ofrece un entorno privilegiado para el descubrimiento de la biodiversidad y la historia que han modelado este enclave durante siglos.
Información de interés
En el extremo oriental de la provincia de Burgos, compartido con Soria, se extiende el Parque Natural del Cañón del río Lobos. Este desfiladero de origen kárstico, tallado por el agua a lo largo de milenios, forma un profundo cañón flanqueado por escarpados farallones calizos. El tramo burgalés ofrece al visitante un contacto más íntimo con la naturaleza. Desde la localidad de Hontoria del Pinar se accede fácilmente a este paraje, ideal para recorrer a pie por sus sendas. Durante el paseo, se atraviesan bosques de sabinas y pinos laricios. Una de las joyas faunísticas del cañón es la colonia de buitres leonados (Gyps fulvus), con cerca de un centenar de parejas que encuentran refugio en las repisas rocosas del cañón.
A las puertas de la Sierra de la Demanda se encuentra el yacimiento arqueológico de Atapuerca, declarado Patrimonio Mundial por la UNESCO en el año 2000. Este enclave ha revolucionado el conocimiento sobre la evolución humana, proporcionando fósiles clave como los del Homo antecessor, el europeo más antiguo conocido hasta la fecha.
La zona alberga una red de yacimientos situados en la Trinchera del Ferrocarril, descubiertos a raíz de unas obras ferroviarias a finales del siglo XIX. En este corredor geológico se encuentran lugares como la Sima del Elefante, la Gran Dolina o la Sima de los Huesos, todos ellos esenciales para comprender más de un millón de años de historia.
La visita al yacimiento se complementa con espacios como el Parque Arqueológico, el aula Emiliano Aguirre o la exposición “Atapuerca: Un millón de años”. Un recorrido didáctico e inmersivo que conecta ciencia, historia y naturaleza.
Enclavado en la localidad burgalesa de Santo Domingo de Silos, este monasterio benedictino es uno de los referentes del arte románico en Europa. Su claustro, construido entre los siglos XI y XII, destaca por sus capiteles, en los que conviven motivos vegetales, animales y bíblicos. La iglesia actual es neoclásica, aunque conserva vestigios de un antiguo templo mozárabe del siglo X.
Este monasterio forma parte de una red de espacios monásticos de gran relevancia en la región: el Monasterio de San Pedro de Arlanza, el Monasterio de San Juan de Ortega —ligado al Camino de Santiago—, las ruinas del Monasterio de Santa María de Alveinte, y el Monasterio de Santa María de Bujedo, de tradición cisterciense.
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Las aves del Parque Natural
El grupo más abundante y representativo de este espacio natural son sin duda las aves, con más de 90 especies catalogadas. Entre las rapaces diurnas destacan grandes emblemas como el águila real (Aquila chrysaetos), el águila calzada (Hieraaetus pennatus), el águila culebrera (Circaetus gallicus) y el abejero europeo (Pernis apivorus). También están presentes el azor (Accipiter gentilis), el gavilán (Accipiter nisus), el halcón peregrino (Falco peregrinus) y el alimoche (Neophron percnopterus), este último en situación vulnerable.
Entre las nocturnas, destaca el majestuoso búho real (Bubo bubo), y entre las aves forestales, especies como el agataedor euroasiático (Certhia familiaris) y el carbonero palustre (Poecile palustris). En zonas abiertas y de montaña sobreviven especies como la perdiz pardilla (Perdix perdix).
Cabe destacar que el entorno sirve de corredor migratorio y área de invernada para otras muchas especies de aves, lo que refuerza el papel de la Sierra de la Demanda como uno de los espacios clave para la conservación de la avifauna en el norte peninsular.
Fauna
La Sierra de la Demanda da cobijo a más de 190 especies de vertebrados. Destacan grandes mamíferos como el lobo ibérico (Canis lupus), el ciervo (Cervus elaphus), el corzo (Capreolus capreolus), el jabalí (Sus scrofa) y el gato montés (Felis silvestris), así como carnívoros medianos como el tejón (Meles meles), la nutria (Lutra lutra) y el escaso desmán de los Pirineos (Galemys pyrenaicus).
Entre los reptiles destacan especies en regresión como el lagarto verde (Lacerta bilineata), la culebra de collar (Natrix natrix), y las víboras aspíd (Vipera aspis) y hocicuda (Vipera latastei). Además, el parque acoge a especies de anfibios, como el tritón palmeado (Lissotriton helveticus) y el sapo de espuelas (Pleobates cultripes), este último en el límite norte de su distribución.
